Las persianas de las terrazas al estar en contacto con el exterior pueden acumular suciedad; para su mantenimiento y limpieza te enumeramos consejos sencillos.

Lo primero que debes hacer para el mantenimiento y cuidado de tus persianas es revisarlas con regularidad para determinar que funcionan correctamente. Observa si tiene lamas rotas, corren mal o las cintas están dañadas. No esperes que el desperfecto sea mayor para repararlas porque quizá tengas que cambiarlas por unas nuevas.

Para mantener tus persianas en perfectas condiciones, la mejor manera es limpiándolas correctamente y de forma regular para evitar que se acumule el polvo y otras suciedades que pueden estropearlas.

Las persianas de terraza debes limpiarlas una vez a la semana o cada 15 días dependiendo de la suciedad que puedan acumular.

Te recomendamos:

• Retirar el polvo con un plumero limpio.
• Usar el aspirador con un cabezal de cepillo acceder a los lugares más complicados o pequeños rincones.
• Atender los distintos procedimientos según el material de la persiana.

Persianas de madera

• Evita el uso de trapos humedecidos con agua.
• Después de quitarles el polvo, pasa un trapo limpio humedecido con un producto especial para limpiar madera o para limpiar pisos de parquet.
• Por último, pásales un trapo limpio para sellar la superficie y dejarla brillante.

Este tipo de persianas requieren anualmente de un cambio de barniz, lijado y sellado para evitar que les caigan plagas como termitas. En el mercado hay muy buenos productos para protegerlas. Pregunta por el barniz de poro abierto pues no crea una película en el exterior de su superficie pero la protege. Con este barniz se puede recuperar la madera decolorada por el efecto de la lluvia y el sol. También permite que la madera respire, se contraiga y se dilate sin que aparezcan grietas.

Persianas de PVC

• Puedes limpiarlas con una bayeta humedecida en agua y con un jabón neutro.
• Si están muy sucias, puedes usar un producto de limpieza más fuerte como uno quita-grasa y frota las manchas más difíciles.
• Luego pasa un trapo para secarlas y dejarlas como nuevas.

Persianas de aluminio

• Luego de quitarles el polvo, pásales un trapo empapado con un poco de alcohol y te quedarán muy limpias.
• También se recomienda el uso de agua con un poquito de amoniaco para su limpieza. Les pasas un trapo humedecido con esa mezcla y quedan bien limpias.

Es aconsejable limpiar las guías con el aspirador y engrasarlas para facilitar el deslizamiento de la persiana.

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